El etiquetado calórico (la información sobre la cantidad de calorías en la etiqueta de los alimentos) está recomendado para reducir la ingesta de calorías con los alimentos y las bebidas alcohólicas
Investigadores descubrieron que las personas a las que se les había diagnosticado un trastorno alimentario cambiaban su comportamiento si se les presentaba un menú con etiquetas de calorías
El efecto de la información calórica es modesto, pero los pequeños cambios diarios en el consumo de calorías podrían tener efectos significativos si se mantienen a largo plazo