Un nuevo estudio ha evaluado un nuevo tratamiento de mantenimiento para el cáncer colorrectal metastásico (CCRm). Concretamente, los hallazgos de este trabajo sugieren que una combinación de panitumumab y capecitabina en dosis bajas podría ayudar a prolongar la supervivencia en pacientes con esta enfermedad. Así, este régimen parece ser eficaz y bien tolerado, especialmente para pacientes con CCRm con KRAS de tipo salvaje que habían respondido previamente al tratamiento.
El cáncer colorrectal es una de las principales causas de muerte por cáncer en todo el mundo. El tratamiento estándar suele implicar una combinación de quimioterapia y terapias dirigidas, pero muchos pacientes enfrentan desafíos relacionados con la toxicidad y la resistencia al tratamiento, lo que puede llevar a interrupciones del tratamiento.
Por tanto, este estudio se ha puesto el objetivo de evaluar si un tratamiento de mantenimiento de menor intensidad podría ayudar a mantener el cáncer bajo control después del tratamiento inicial.
El estudio involucró a 25 pacientes con cáncer colorrectal metastásico con KRAS y BRAF de tipo salvaje, que primero recibieron seis rondas de quimioterapia estándar basada en 5-FU con panitumumab. Los pacientes que respondieron bien cambiaron posteriormente a un tratamiento de mantenimiento de panitumumab cada dos semanas y una dosis baja y continua de capecitabina. Los resultados mostraron que los pacientes tuvieron una supervivencia libre de progresión media de 18 meses y una supervivencia general media de 45 meses, lo que indica un fuerte beneficio potencial.
Asimismo, los pacientes con metástasis detectadas al mismo tiempo que el tumor primario mostraron una supervivencia libre de progresión más prolongada que aquellos con metástasis que aparecieron más tarde. El tratamiento también fue bien tolerado: sólo el 8 % de los pacientes experimentaron efectos secundarios graves, como erupciones cutáneas o diarrea, que se controlaron con tratamientos estándar.
“En nuestra investigación, el perfil de toxicidad fue muy aceptable y ningún paciente necesitó interrumpir el tratamiento ni tuvo que modificar la dosis debido a la toxicidad”, destacan los investigadores de este nuevo estudio.
Encontrar una forma de mantener el cáncer bajo control y reducir los efectos secundarios es un objetivo importante en el tratamiento del cáncer. Si bien se han estudiado otras terapias de mantenimiento como Bevacizumab y Cetuximab, esta investigación sugiere que Panitumumab con Capecitabina en dosis bajas podría ser una nueva opción prometedora.
Así, los resultados de este estudio sugieren que esta combinación puede ayudar a retrasar la progresión de la enfermedad y, al mismo tiempo, mantener los efectos secundarios bajo control, mejorando en última instancia la calidad de vida de los pacientes.
Aunque se necesitan estudios más amplios, estos hallazgos abren la puerta a más ensayos clínicos para confirmar los beneficios de este régimen. Si se valida, este enfoque podría cambiar el estándar de atención para los pacientes con cáncer colorrectal metastásico, en particular aquellos que no pueden tolerar una quimioterapia más intensiva.