Durante el año 2024, el número de alertas y notificaciones alimentarias recibidas a través del Sistema de Información Rápida europeo (RASFF) ha ascendido a un total de 4.814 (frente a las 4205 del año 2023), de las cuales 1.201 han sido alertas (25 %), 2.035 notificaciones de información (42 %) y 1.578 rechazos en frontera (33 %).
Del total de los riesgos, los residuos de fitosanitarios y la contaminación biológica son los que más notificaciones han provocado, un 21 % en ambos casos, habiendo disminuido el porcentaje respecto al año anterior desde el 22,5 %, también en ambos casos. Muy cerca se posicionan los fraudes con el 19,5 % habiendo bajado ligeramente respecto al 20,5 % del año anterior. Las toxinas naturales son las que más han aumentado, pasando de un 13 % del total a un 17 %. La contaminación física y los metales pesados se mantienen prácticamente en los mismos porcentajes.
Las medias anuales referentes a los riesgos identificados y la evolución de los mismos por cuatrimestres quedan de la siguiente manera:
En el caso de la contaminación biológica, la salmonela ha sido el riesgo identificado en el 60 % de los casos (de media anual), porcentaje ligeramente superior respecto al año anterior que fue de 58 %.
Si dividimos el grupo entre las salmonelas de importancia para la salud humana (S.typhimurium y S.enteritidis) y otras salmonelas, vemos que siguen siendo estas últimas las que prevalecen en un 80,5 %, liegramente superior que el año anterior, que supusieron un 79 %. Las notificaciones por S.enteritidis han supuesto un 13 % de media, habiendo descendido respecto al año anterior, que supusieron el 16 %. S.typhimurium ha tenido el 6,5 %, aumentado del 5 % del año anterior. El pollo ha sido el principal protagonista, con una media del 60,5% de los casos.
Siguiendo con la contaminación biológica, este año siguen destacando los casos por Listeria monocytogenes, que han aumentado hasta el 17,5 % del total (en 2023 fue el 14,5 %) estando los quesos (sobre todo los blandos) y el salmón ahumado como principales causantes de las notificaciones.
Dentro de las contaminaciones por toxinas naturales, en el 65,5 % de los casos la contaminación ha sido causada por aflatoxinas, habiendo aumentado desde el 57,5 % del 2023. El cacahuete es el producto implicado en el 39 % de la mayoría de las ocasiones.
Respecto a los residuos, los residuos de fitosanitarios han supuesto el 94 %. Diferentes plaguicidas en una misma muestra por un lado y el clorpirifos, prohibido su uso en Europa, por otro han sido responsables de más de tres cuartas partes. Los principales productos implicados son cítricos, hierbas aromáticas, pimientos y arroz.
En el caso de los fraudes, los más destacados son las sustancias prohibidas en complementos alimenticios, habiendo descendido ligeramente del 42,5 % del año anterior al 41,5 %. Por otro lado, los alérgenos no declarados en el etiquetado, han bajado también, pasando de un 24,5 % a un 22,5 %.
En cuanto al origen de los productos contaminados, destaca, a lo largo del año, el que la mayoría de las notificaciones tienen origen en Europa (41 %) y Asia (35,5 %). Si comparamos con los datos del año 2023, Europa tuvo un 44,5 %, habiendo descendido el porcentaje, y Asia un 31,5 %, habiendo aumentado.