El sector se reúne con motivo del Día Nacional de la Nutrición

Con motivo del Día Nacional de la Nutrición (DNN), como cada 28 de mayo desde hace ya 24 años, en el día de hoy ha tenido lugar la presentación de esta iniciativa en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) bajo el lema “Procesando seguridad, sostenibilidad y salud”, con la finalidad de dar valor al procesamiento adecuado de los alimentos para contribuir a una alimentación equilibrada y sostenible. 

El evento ha sido moderado por María Rosaura Leis Trabazo, vicepresidenta de Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (Fesnad), dando valor a la nutrición como base de la salud, sirviendo esta de “prevención desde los primeros momentos de la vida”, 

Posteriormente, tomó la palabra Gregorio Varela-Moreiras, presidente de Fesnad, quien hizo un breve repaso a la trayectoria del evento, además de comenzar resaltando el lema de este año, el cual considera “importante para no crear confusión en el procesado de alimentos”, destacando que, en nuestra vida cotidiana, dos tercios de nuestra alimentación proceden de alimentos procesados, por lo que su correcta interpretación se convierte en imprescindible, recalcando que “en tiempos de guerras o emergencias, poder disponer de alimentos procesados es una riqueza para llevar mejor estas situaciones de vulnerabilidad”. También tuvo tiempo de realizar una fotografía sobre el estado actual de los procesados en la actualidad, resaltando el papel de la reformulación y exponiendo los pros y sus contras de esta técnica. 

Desde el Ministerio, José Miguel Herrero Velasco, director general de Alimentación, garantizó que el propósito del país es el de “garantizar la seguridad, sostenibilidad y la adaptación de las demandas de los consumidores, para producir alimentos saludables, accesibles y con una calidad extraordinaria”, además de valorar de manera positiva el apoyo científico en todo su proceso, desde la producción hasta los propios consumidores. 

En esta línea, la subdirectora adjunta de Calidad y Sostenibilidad Alimentaria, Marta Pérez González, durante su intervención, habló del propósito de mantener a España como una referencia a nivel alimentario, sobre todo en las medidas actuales para garantizar el abastecimiento, con ejemplos claros y recientes como “en su momento, durante la pandemia, o hace poco con el famoso apagón”. 

La secretaria de Fesnad, Mercedes López-Pardo Martínez, abordó esta cuestión desde el ámbito sanitario, recordándonos que “llevamos procesando alimentos toda la vida, con técnicas de secado, salado, descongelado…”, valorando los pros y las contras de los productos procesados, además de resaltar que la clave de éstos está en la calidad del procesado, no en demonizar dicho concepto. 

Por su parte, Yvonne Colomer, directora ejecutiva de la Fundación Triptolemos, puso el enfoque sobre este debate en las informaciones y desinformaciones que podemos encontrarnos en nuestro día a día, advirtiendo que “muchas veces leemos información sin saber su procedencia, y estamos entretenidos, pero no informados”, arrojando el dato de que “el 30 % de las noticias falsas que circulan son sobre temas alimentarios. Creemos que podemos identificarlas, y nos pasa a todos, porque son de fácil acceso” recomendando que, ante esta situación, recurramos a comprobar la información mediante fuentes oficiales.

Finalmente, Ascensión Marcos Sánchez, investigadora del ICTAN-CSIC y vocal de Fesnad, fue la encargada de rematar esta jornada con la valoración de una encuesta realizada desde la propia Federación durante los meses de abril y mayo, en la que participaron cerca de 600 personas. 

Algunos aspectos que destacar son que el 84 % de la población reconoce que el procesamiento contribuye a evitar riesgos microbiológicos, pero el 86 % aún se muestra confundido sobre qué es un alimento procesado y su impacto en la salud. Más información y educación, la gran demanda ciudadana. 

Además, el 83% afirma seguir siempre las recomendaciones para evitar riesgos alimentarios y un 67 % considera que el procesamiento contribuye a la sostenibilidad, sobre todo por reducir el desperdicio.