La diabetes mellitus preexistente (DMP) en el embarazo aumenta el riesgo de mortalidad y morbilidad materna y perinatal. En este sentido, la reducción de la hiperglucemia materna antes y durante el embarazo puede reducir estos riesgos.
A pesar de la fuerte evidencia de que la atención preconcepcional (ACP), que incluye el logro de objetivos glucémicos estrictos, reduce el riesgo de malformaciones congénitas y otros resultados adversos del embarazo, solo una minoría de las personas la recibe.
Teniendo en cuenta este panorama, la Sociedad Europea de Endocrinología desarrolló una guía de práctica clínica que ofrece recomendaciones para que los profesionales de la salud puedan abordar este cuadro.
Dentro de la guía, se abordan temáticas como la detección y el tamizaje en población de riesgo; la posibilidad del uso de anticoncepción; el manejo farmacológico y dietético; metas de tratamiento y como alcanzarlas; el tipo de parto a preferir y el manejo clínico luego de este.