La suplementación con antocianina y prebióticos mejora el control metabólico en la diabetes 2

En la actualidad, existe un aumento global en la prevalencia de las complicaciones derivadas de la diabetes mellitus tipo 2 (DM2), que a menudo se caracterizan por la coexistencia de hiperglucemia y dislipidemia y un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular. Afortunadamente, esta patología y los riesgos cardiovasculares asociados se pueden prevenir mediante el estilo de vida que involucra nutrición y actividad física. 

Grandes estudios de cohorte han demostrado una efectividad superior de las intervenciones de estilo de vida en los resultados de la DM2 en comparación con los medicamentos estándar para reducir la glucemia. Por lo tanto, el desarrollo de nuevas terapias nutricionales para mejorar la glucemia y la lipidemia de los pacientes con DM2 es esencial junto con los tratamientos estándar.

Los alimentos funcionales son nutrientes con propiedades bioquímicas beneficiosas que han demostrado mejorar los resultados primarios de la diabetes de tipo 2, como la hemoglobina glicosilada (HbA1c), la sensibilidad a la insulina, el control glucémico y los resultados secundarios de las funciones antioxidantes, antiinflamatorias y anticolesterol.

La atención de las investigaciones recientes ha promovido la antocianina, que es un flavonoide vegetal presente en pigmentos de frutas, verduras y algunos granos integrales, debido a sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antidiabéticas, provasculares y de modulación de la microbiota intestinal. 

Las ultimas evidencias sobre pacientes con diabetes tipo 2 concluyeron que la suplementación con antocianina durante 4 semanas o más es eficaz para reducir la HbA1c, la glucosa posprandial a las 2 horas, los triglicéridos (TG) y el colesterol LDL (LDL-C). Asi tambien, se menciona que este flavonoide es eficaz para reducir las complicaciones de la diabetes tipo 2 mediante la modulación de la función endotelial, los niveles de ácido úrico y los metabolitos microbianos en pacientes con prediabetes y diabetes 

Combinación antocianinas y prebióticos 

La antocianina podría inducir mejores resultados en diabetes tipo 2 y cardiovasculares si se consume en combinación con prebióticos moduladores intestinales que mejoran sus funciones cardiometabólicas. 

Los prebióticos son abundantes en la fibra dietética, dentro del grupo de las fibras solubles, el salvado de arroz y la inulina han recibido mucha atención recientemente ya que un estudio de intervención mostró que el salvado de arroz administrado a personas con DM2 redujo la HbA1c en un 15% y la glucosa en ayunas en un 33%, y aumentaron la insulina sérica en un 4%. 

Los efectos hipoglucémicos se atribuyeron a la microbiota intestinal mejorada o a las concentraciones de polipéptido insulinotrópico dependiente de la glucosa (GIP). 

Sin embargo, ningún estudio ha explorado aún si la suplementación combinada de antocianinas y prebióticos afectaría los resultados de la diabetes de tipo 2 y los riesgos cardiovasculares asociados en pacientes que viven con diabetes de tipo 2 y de qué manera.

Es por esto que, un grupo de investigadores internacionales intento demostrar la hipótesis de que un antioxidante antocianino combinado con prebióticos (salvado de arroz y fibra de inulina de alcachofa de Jerusalén) mejoraría los resultados primarios de la DM2, de HbA1c, el control de insulina y glucosa, y los resultados cardiovasculares secundarios del perfil lipídico, estrés oxidativo, inflamación y aptitud cardiorrespiratoria en pacientes con DM2. 

Para ello, un total de 60 pacientes con diabetes mellitus 2 (DM2) fueron asignados aleatoriamente para recibir un antioxidante/prebiótico (grupo de suplemento: SG) o maltodextrina (grupo de control: GC) durante 60 días. 

Se recogieron muestras de sangre venosa al inicio y después de 60 días de intervención para evaluar variables metabólicas sanguíneas (glucosa, insulina y perfiles lipídicos, funciones renal y hepática, estrés oxidativo, inflamación). También se midieron el estado nutricional, la antropometría, la composición corporal (DEXA) y la aptitud cardiorrespiratoria.

¿Cuáles fueron los cambios metabólicos observados tras la suplementación combinada? 

Los resultados del análisis muestran que los beneficios de la suplementación para reducir la glucosa y los lípidos del estudio reflejaron una reducción del 11,9%, 6,7%, y 13,3% en la glucemia plasmática en ayunas, la hemoglobina glicosilada (HbA1c) y LDL-C, respectivamente. “Estas cifras se consideran clínicamente significativos en el tratamiento de la diabetes de tipo 2 y están en línea con estudios anteriores, que utilizaron un solo suplemento de ingrediente prebiótico o antioxidante”, mencionan los autores. 

El presente estudio combinó el antioxidante antocianina con la inulina prebiótica de la alcachofa de Jerusalén, que nunca antes se había suplementado crónicamente en pacientes con diabetes tipo 2. “Las investigaciones limitadas previas sobre el extracto puro de inulina en pacientes con diabetes tipo 2 no proporcionaron detalles de la fuente de inulina y administraron una dosis de inulina mucho más alta, que fue casi cinco veces más alta que nuestra dosis de inulina (21 mg/kgBM/día)”, señalan. 

Resaltan que, comparación, “este estudio mostró mejoras en glucemia plasmática en ayunas (11,9%), HbA1c (6,7%) y LDL-C (13,3%), lo que sugiere que una dosis más baja de nuestro suplemento se puede administrar de manera eficaz y eficiente para inducir tales beneficios en pacientes con DM2”. 

“La tasa de filtración glomerular de la función renal también mejoró de manera significativa en el grupo suplementado, pero no en el grupo control que recibía placebo”, sostienen. 

No hallaron efectos significativos sobre los biomarcadores de estrés oxidativo indicados por los niveles de peróxido lipídico y niveles de vitamina C en pacientes después de la suplementación. “Es probable que los ingredientes prebióticos y probióticos no dieran como resultado efectos antioxidantes sinérgicos. Dicha sinergia de es un tema de reciente debate en la investigación y puede funcionar de manera diferente en diferentes grupos de pacientes”, enuncian. 

Cabe destacar que el suplemento tendió a disminuir la inflamación, como lo demuestra la reducción de la PCR y el recuento de leucocitos. Por consiguiente, los expertos sugieren que estudios futuros deberían considerar una dosis mayor de antocianina e inulina para inducir efectos beneficiosos significativos sobre las actividades antioxidantes e inflamatorias. 

Los pacientes con DMT2 de este estudio eran todos sedentarios con niveles reducidos de capacidad cardiorrespiratoria. La suplementación de intervención de 60 días no afectó significativamente el volumen máximo de oxigeno de los pacientes ni la distancia recorrida durante el ejercicio. “Aunque esta intervención no postuló cambiar el comportamiento de actividad física de los pacientes, un estilo de vida sedentario en DMT2 sigue siendo un problema complejo que requiere una intervención de múltiples componentes”, subraya el artículo.

No se observaron efectos adversos de los suplementos sobre la función hepática o renal. Por consiguiente, explican que los mismos pueden utilizarse en el tratamiento farmacológico de la diabetes sin posibles interacciones. 

“A pesar de sus efectos antihiperglucémicos y antilipidémicos, y de su efecto antiinflamatorio, la dosis o la duración de la suplementación pueden ser insuficientes para compensar las diferencias significativas en otras variables, como el perfil lipídico (CT plasmático, TG y c-HDL), la resistencia a la insulina, el estrés oxidativo, la inflamación y la capacidad aeróbica”, comentan los expertos. 

De esta manera, los últimos estudios coinciden colectivamente en que una dosis moderada de fibra de salvado de arroz prebiótico y una dosis alta de suplementación con inulina se consideran eficaces como terapéutica complementaria para la DM2. Sin embargo, “nuestro estudio agregó el beneficio antioxidante de la antocianina como suplemento beneficioso de alimentos funcionales adicional utilizando dosis relativamente bajas”, destacan. 

En resumen, los resultados sugieren beneficios terapéuticos para la diabetes derivados de la ingesta de una combinación de suplementos prebióticos y antioxidantes con bajas dosis de inulina, antocianina y salvado de arroz en pacientes con diabetes tipo 2. 

Se observaron mejoras en los perfiles de glucemia y lipidemia tras 60 días de suplementación, independientemente de la condición física, lo que sugiere la eficacia de esta combinación de suplementos como terapia complementaria para la diabetes tipo 2, sin efectos adversos. 

“Estudios futuros deberían considerar dosis más altas, especialmente de antocianina, para inducir efectos adicionales sobre el estrés oxidativo y los perfiles de inflamación. Es probable que la incorporación de entrenamiento físico y una mayor duración del consumo de alimentos funcionales con prebióticos y antioxidantes aumente sus beneficios preventivos contra la diabetes”, concluyen.